¿Cuáles son los beneficios de consumir carne de cerdo?

¿Alguna vez te has preguntado cuáles son los beneficios de consumir carne de cerdo? Son muchas, ya que esta carne prácticamente no contiene grasas trans, por lo que es adecuada para las dietas para reducir el colesterol o para un corazón sano.

Contiene vitaminas B1, B3, B6 y B12, necesarias en los procesos metabólicos que transforman los hidratos de carbono, las grasas y las proteínas en energía para nuestro organismo, además de un alto contenido en minerales como fósforo, potasio y zinc.

El valor calórico de la carne de cerdo no es muy elevado en sus partes magras, situándose entre las 200 y 300 kcal por cada 100 gramos.

Beneficios de consumir carne de cerdo

1. La vitamina B1 o tiamina es vital para el crecimiento y la reparación de los músculos y los tejidos nerviosos. También es útil para el metabolismo de los carbohidratos.

2. La presencia de la vitamina B2 o riboflavina, ayuda a mantener la piel y a reparar los tejidos dañados.

3. La vitamina B6 o pirixodina interviene en el metabolismo de neurotransmisores que regulan el estado de ánimo, como la serotonina . Es necesaria para que el cuerpo fabrique adecuadamente anticuerpos y eritrocitos (glóbulos rojos) y para una adecuada absorción de la vitamina B12 y del magnesio.

4. La carne de cerdo es considerada una excelente fuente hierro, en promedio 100 gramos de carne magra de cerdo aportan 1.5 miligramos de hierro.

5. Ayuda a fortalecer los huesos y a mantenerlos en buena forma.

6. El zinc refuerza el sistema inmunitario y mejora la resistencia del organismo contra numerosas enfermedades.

7. Es una buena fuente de proteínas y aminoácidos, lo que es vital para las personas interesadas en la musculación.

8. La ingesta de carne de cerdo también asegura una mejor inmunidad del cuerpo debido a la presencia de antioxidantes esenciales.

Aunque la carne de cerdo se ha considerado tradicionalmente como una carne roja, hay una serie de factores tanto estructurales, como nutricionales y organolépticos que hacen que esté muy próxima a las carnes blancas. De hecho, la OMS considera a la carne de cerdo como una carne blanca por su bajo contenido graso.

En cambio, también hay que tener cuidado, ya que algunas preparaciones como el bacon y los cortes grasos favorecen la acumulación de colesterol y contienen grasas saturadas que provocan la obstrucción de las arterias, por lo que no son aptas para el consumo diario y en porciones incontroladas.

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